-Presidente de Frigoríficos de Colombia, Álvaro Urrea, hace un llamado al Gobierno Nacional para que se regule la exportación de animales en pie por causar fuertes perjuicios a la economía colombiana y al sector cárnico.
-Exportación de 20 mil animales en pie, afecta cerca de 40 mil empleos en Colombia. Al año se exportan en promedio 80 mil animales en condiciones no aptas, lo que no solo afecta la economía sino las especies de animales.
Un llamado de atención hace el presidente de la Asociación Frigoríficos de Colombia, Álvaro Urrea a las autoridades colombianas para que se regule la venta y traslado de animales en pie a otros países y explicó las graves consecuencias que estas exportaciones traen para la economía del país y para los animales por evidenciarse desafortunados casos de maltrato.
“La exportación de animales en pie solo beneficia al vendedor, en cambio sí trae graves consecuencias para la industria y la economía colombiana”. Así lo explicó Álvaro Urrea, dado un reciente caso de exportación de 20 mil animales en pie. Esta sola venta conlleva a las siguientes consecuencias:
1. Por la exportación de 20 mil animales en pie, se dejan de otorgar cerca de 40 mil empleos en nuestro país. Estos empleos se generan a los transportadores que trasladan las 20 mil especies de animales dentro del territorio nacional, pero además para mover este nivel de carga, se requieren conductores y ayudantes. Para ser más precisos en la cuenta, un furgón de carne refrigerado carga en promedio 20 animales en canal, lo que significa que para trasladar 20 mil animales se requieren 1.000 vehículos que deben pagar fletes, deben tener conductor y ayudante y deben pagar combustible y peajes.
2. Un planta de beneficio con capacidad de 300 animales diarios, es decir un promedio de 8.000 a 9.000 animales al mes, emplea 250 operarios directos, lo que se traduce en 250 familias que se benefician de estos empleos hablando solo de este promedio de animales, lo que significa que para beneficiar los 20 mil animales, son 3 meses de trabajo de una planta, es decir cerca de 700 operarios que dejan de emplearse por sacar estos animales del país.
3. Las plantas de beneficio también generan empleos indirectos como el transporte para el traslado de sangre, contenido ruminal, la bilis, los productos cárnicos no comestibles como el cebo, la carne canal, la carne despostada, las pieles, los huesos, todo esto requiere vehículos diferentes, todos pagan impuestos, combustibles y seguros en nuestro país.
4. Una carnicería en nuestro país vende en promedio una res diaria, con una venta promedio de 3 millones de pesos. Para esa carnicería se requiere mínimo un carnicero y un ayudante, lo que en matemática sencilla para comercializar 20,000 animales se requerirían 40.000 personas.
5. Hablando del tema económico para el sector industrial, si a una planta de beneficio dejan de ingresar 20 mil animales con un pago de una guía que en promedio cuesta $120.000 por animal, significan $2.600 millones de pesos que se dejan de percibir para el movimiento de la economía colombiana.
6. El Estado también se afecta y no solo las plantas de beneficio porque existe el Fondo Parafiscal con la cuenta carne y leche que recauda en promedio 25 mil pesos por animal, lo que significa que al Fondo le dejan de entrar $500 millones de pesos más otros $500 millones de pesos que se pagan de impuesto de degüello que es de carácter departamental.
En conclusión, sacar sólo 20 mil animales, implica dejar de generar más de 40 mil empleos; por su parte las plantas de beneficio dejan de percibir $2.600 millones de pesos y el Gobierno Nacional y departamental deja de recibir cerca de $1.000 millones, lo que sumado implica $3.600 millones de pesos que deja de recibir el país solo por la exportación de 20 mil animales, lo delicado es que este mismo caso se presenta 4 veces al año, es decir, que ya no se estaría hablando de 20 mil animales sino de 80 mil, lo que sumado resultaría en la pérdida de 160 mil empleos. Las plantas de beneficio dejarían de recibir $10.400 millones, el gobierno nacional y departamental dejaría de percibir cerca de $4 mil millones en impuestos en un año, lo que sin duda genera un impacto negativo en la economía del país sin contar que esta modalidad representa una situación inevitable de maltrato animal.
Otro factor que preocupa a la Asociación Frigoríficos de Colombia, es el posible ingreso de animales por contrabando al país, al poner en riesgo la salud pública por contagio de brote de aftosa de animales provenientes de Venezuela lo cual desde ahora anunciamos que de suceder truncaría de inmediato todos los objetivos de exportación planteados por la Presidencia de la República y obviamente el peor golpe económico para el sector cárnico.
Bienestar animal:
“La exportación de animales en pie, trae riesgos para el bienestar animal ya que no se les da el trato adecuado. Estas especies no están acostumbradas a andar en superficies que no son las de su naturaleza como pastizales o potreros, sino que en los barcos están expuestos a superficies duras afectando sus pezuñas, en estado de confinamiento, estrés y al ser extensiva nuestra ganadería se requiere en promedio una hectárea por animal, lo que se reduciría a un metro por animal, es decir que por alrededor de un mes en mar abierto los animales estarían en condiciones infra animales que no podemos permitir” puntualizó Urrea.
Por todo lo anterior, es necesario que las autoridades regulen la exportación de los animales en pie que solo beneficia al que realiza la venta, aplicándole las normas tributarias de ley para que exista competencia leal, teniendo en cuenta que no existe la prohibición de la venta de estos animales por el libre comercio, aunque desde Frigoríficos de Colombia estamos en total desacuerdo.
Cifras:
Recordó Urrea que cifras de la Polfa evidencian que los capturados por tráfico ilegal de ganado en pie desde Venezuela pasó de 8 personas en el 2017 a 31 en el 2018 y a 20 en lo corrido del año hasta el 16 de octubre. Por contrabando de carne, la cifra es de 6 personas capturadas en el 2018 y un número igual en el 2019. La extinción de dominio ha operado sobre un total de 64 bienes valorados en 5.010 millones en los 2 más recientes años.
Un hecho a destacar es que gradualmente emerge la frontera con Ecuador en las operaciones de la Polfa con decomisos valorados en $ 2.410.000 de acuerdo con estadísticas 2018 y 2019.
A manera de ejemplo se señala que en los diez primeros meses del año anterior se realizaron 441 operativos, para decomisar 112 kilos de carne por valor de $41.217 millones de pesos. En el mismo periodo se aprehendieron 800 reses valoradas en $ 924 millones, provenientes de los 3 departamentos epicentro del contrabando.
Mediante la estrategia CIIP se pretende fortalecer los 11 puestos de control integral en operación, con efectivos de la Policía, las Fuerzas Militares, el ICA, el Invima y la Armada Nacional, en los cuales se revisa que esté en regla la documentación del ganado en pie y productos perecederos.
La CIIP debe cruzar bases de datos de las instituciones anotadas para auscultar infracciones a las normas y si es necesario intervenir desde el centro de operaciones 24 horas que funciona en el ICA.
Su aumento podría dar inclusive para realizar exportaciones desde Colombia a diferentes mercados internacionales teniendo en cuenta los “ahorros” de la cadena del contrabando que no paga ningún tipo de impuestos, como si lo hacen además en función de la cadena de custodia de la salud pública, los operadores legales de todo tipo de carne. Inclusive, indaga el directivo por el bienestar del ganado en pie que también entra y sale de contrabando.
Las cifras anteriores demuestran parte de la ilegalidad que se vive con el país fronterizo, lo que conlleva un alto riesgo en la condición sanitaria de nuestro país, y que de no tomar las medidas necesarias nos veremos abocados a un problema irreversible en el corto y mediano plazo.